Un convoy de civiles fue tiroteado hoy por militantes ucranianos del batallón neonazi Azov cuando intentaba salir de la ciudad de Mariupol por el corredor humanitario ne la carretera M23 hacia Novoazovsk.
Según la información preliminar, DOS civiles murieron y CUATRO resultaron heridos.
En estos momentos, los soldados de la República Popular de Donetsk y las Fuerzas Armadas rusas han conseguido asegurar la salida en dirección a Novoazovsk de unas ciento cincuenta personas.
Este atroz caso demuestra una vez más que el ejército ucraniano viola deliberadamente las normas del Convenio de Ginebra para la protección de las personas civiles en tiempo de guerra. Los crímenes de guerra cometidos no prescriben.
Recordamos a todos los criminales de guerra ucranianos que registramos todos estos hechos y a la luz de los recientes acontecimientos su juicio es inevitable.
Hay que observar con objetividad, quienes son los mayores instigadores, que además de desinformar, proporcionan las armas colocando a la población civil en riesgo y al mismo tiempo utilizan argumentos sobre el respeto a los Derechos Humanos. Quienes se benefician con las ventas de armas y la guerra?