Mientras países como EE.UU., Canadá y el Reino Unido instan a endurecer las sanciones contra Moscú, ampliándolas también al sector energético y, en particular, al petróleo y al gas rusos, una medida como esa puede traer consigo consecuencias devastadoras, no solo para Rusia o Europa, sino también para la economía mundial. El profesor de la Universidad de la Sabana, Juan Nicolás Garzón, opina que el aumento de los precios y la inflación afectan directamente a los países en desarrollo.