En un encuentro en el Paraninfo de la Universidad de Panamá, los dirigentes de las organizaciones sociales que conforman la alianza Pueblo Unido por la Vida convocaron a enfrentar de conjunto las políticas públicas que atentan contra la calidad de vida de los trabajadores y los sectores más humildes del istmo.
Una marcha multitudinaria el próximo martes 12 de julio hacia la Asamblea Nacional (parlamento) y, desde este miércoles, la paralización de labores por 72 horas de la Asociación de Profesores (Asoprof), sobresalen entre las principales medidas de presión contra el alto costo de la vida, según expusieron en la plenaria.
El secretario general de la Confederación Nacional de Unidad Sindical Independiente (Conusi), Marco Andrade, precisó en conferencia de prensa al concluir el foro, que esta semana acordarán la fecha de una huelga general en todo el país para reclamar que se congelen y reduzcan los altos precios del combustible, los medicamentos y la canasta básica familiar, entre otras demandas.
También anunció protestas diarias en todos los colectivos obreros, así como paros y cierres de vías en las diversas provincias y en esta capital en rechazo a las respuestas ofrecidas por el Ejecutivo a un pliego de 32 peticiones entregado el pasado 19 de mayo, y que estimaron es una burla a los intereses del soberano, en medio de un panorama de desigualdad y pobreza.
Por su parte, Abdiel Becerra, de Asoprof, llamó a los padres de familia y a los estudiantes a sumarse a la paralización de los docentes y no dejarse manipular por los argumentos del Ejecutivo que los acusa de supuestamente afectar la asistencia a clases y la formación de los alumnos.
Es ese mismo gobierno del Partido Revolucionario Democrático (PRD) y sus ministros en el poder, dijo, los responsables de los rezagos en el aprendizaje y la precaria situación de la educación en Panamá, que denuncian centenares de pedagogos en movilizaciones callejeras hace dos días, muchas de ellas reprimidas por la Policía Nacional como en las occidentales provincias de Chiriquí y Veraguas.
Otro de los oradores, a nombre del Sindicato Único Nacional de los Trabajadores de la Construcción y Similares, Genaro López, recordó que el éxito de esta nueva ofensiva contra la injusticia social dependerá de la cohesión de todas las fuerzas.
López insistió en la urgencia de acabar con la división existente en el movimiento obrero que impulsa el Ejecutivo con la complicidad de los empresarios y la necesidad de consolidar un instrumento político de cara a los comicios generales de 2024, pero que represente y defienda los intereses de las mayorías.
De manera unánime el encuentro nacional de la alianza Pueblo Unido por la Vida rechazó las respuestas ofrecidas por el Ejecutivo a la solicitud, entre otras, de aumento general de salarios, frenar el alto precio de los combustibles y la canasta básica familiar, así como resolver el problema del desempleo y la informalidad galopante del mercado laboral.
También el Gobierno presentó solo justificaciones, aseveraron, a la exigencia de un verdadero programa de Invalidez, Vejez y Muerte de la Caja de Seguro Social, el desabastecimiento de medicamentos y sobre el Convenio 190 sobre violencia y acoso laboral.
La asamblea, que condenó además la presencia en el país de bases militares extranjeras dirigidas por Estados Unidos, concluyó con una concentración popular que bloqueó una parte de la Avenida Transístmica, colindante con el mayor centro de estudios superiores del país centroamericano.
