El primer ministro saliente del Reino Unido, Boris Johnson, ha anunciado este jueves, durante uno de los últimos actos públicos en su cargo, que dio luz verde para la asignación de 700 millones de libras esterlinas (más de 810 millones de dólares) presupuestarias para financiar la construcción de la planta nuclear Sizewell C, ubicada en el condado de Suffolk.
En su discurso, en el lugar de las obras, el ‘premier’ aseguró que la inversión mejorará la seguridad energética de la nación, mientras los ciudadanos de a pie se enfrentan al aumento de las facturas de electricidad. Johnson explicó que si la planta Hinkley Point C, ubicada en el condado de Somerset al suroeste del país, funcionará este año, y “se reduciría la factura de combustible en 3.000 millones de libras”, detalla el canal ITV.
“Por eso tenemos que sacar nuestro dedo nacional y ponernos a trabajar en Sizewell C. Por eso, estamos invirtiendo 700 millones de libras en el acuerdo, solo una parte de los 1.700 millones de libras (más de 1.966 millones de dólares) de financiación gubernamental disponibles para desarrollar un proyecto nuclear a gran escala hasta la fase de inversión final en ese Parlamento”, subrayó.
Asimismo, el jefe del Ejecutivo se mostró seguro de que el proyecto de construcción de Sizewell C “superará la línea, porque sería una absoluta locura no hacerlo“.
Enviar el proyecto “a la papelera”
Mientras, activistas del grupo ‘Stop Sizewell C’ protestaron contra la decisión de Johnson, tachándola de “errónea”, y argumentando que la energía nuclear no es verde. El grupo calificó el proyecto de “otro reventón de infraestructura” de Johnson que su sucesor “debería enviar a la papelera”.
Come and join the protest at Sizewell. It's your taxes and energy costs that would pay for this unwanted, unnecessary white elephant pic.twitter.com/ULzxEdyAQ2
— Stop Sizewell C (TEAGS) (@StopSizewellC) September 1, 2022
Además, los activistas denuncian que los altos costes del proyecto de la planta caerán sobre los contribuyentes corrientes. “Es totalmente erróneo atar al próximo primer ministro y a miles de millones de los contribuyentes a este proyecto perjudicial, cuyo coste desmesurado, larga construcción, tecnología propensa a fallos y suministro de agua a largo plazo son tan inciertos”, subrayan.
- Una vez construida, la planta de Sizewell C de 3,2 gigavatios generará energía para unos 6 millones de hogares durante 60 años. Se estima que el levantamiento de la instalación costaría de 20.000 a 30.000 millones libras esterlinas (de 23.000 a 34.000 millones de dólares), reseña The Guardian.
- Inicialmente, los planes de construcción fueron elaborados por la empresa energética francesa Electricidad de Francia (EDF), que tiene una participación del 80 % en el proyecto, y la compañía estatal Grupo de Energía Nuclear General de China (CGN) que posee el 20 %. Sin embargo, el Gobierno británico quiere evitar la participación de Pekín en el proyecto ante el empeoramiento de las relaciones entre los dos países.
