“Aunque nunca lo alcanzarán, su objetivo final es dividir el país y su camino es crear un nuevo Siria, mediante la provocación de inseguridad, destrucción, el cierre de negocios, desactivar la producción y la economía, así como detener el desarrollo de la ciencia y la tecnología”, denunció el lunes el comandante en jefe del Ejército de Irán, el general de división Abdul Rahim Musavi.
El general Musvai advirtió que Irán es objeto de una “guerra híbrida”, en la que los enemigos se han unido uno al otro y aplicado todos los componentes de potencia.
A su juicio, con los últimos acontecimientos en el país persa, los enemigos encontraron una oportunidad para implementar las planificaciones que llevaron realizando por años en sus laboratorios de ideas.
Enumerando algunas de las tácticas de los enemigos en la referida guerra, destacó que los disturbios han sido planificados y diseñados con la ayuda financiera y de inteligencia desde el exterior, mientras “los grupos secesionistas y las cadenas hostiles se involucran directamente en la escena, pues se encargan del comando del campo”.
Musavi atribuyó todos los ataques y agresiones contra Irán a la inquietud y el temor de los enemigos por las elevadas capacidades de la República Islámica.
No obstante, prosiguió, las experiencias en los años transcurridos desde la victoria de la Revolución Islámica (1979) demuestran que “se puede neutralizar la reciente conspiración del enemigo a la sombra de la unidad nacional y directrices del Líder de la Revolución Islámica”, el ayatolá Seyed Ali Jamenei.