Olga Lakunova, combatiente de las Fuerzas de Defensa Territoriales de Ucrania, que recientemente regresó a su país en un intercambio de prisioneros con Rusia, afirmó que todos los rusos, incluyendo los niños, no tienen derecho a vivir.
Durante una entrevista con un canal ucraniano, Lakunova fue preguntada sobre qué piensa sobre Rusia y sus ciudadanos. «Creo que deben morir, incluso los niños pequeños. No deben de existir. Esto [Rusia] es una especie de frontera muy larga entre Finlandia y China», manifestó. A su vez, los presentadores calificaron su postura de «aguda, pero justa».
Anteriormente, el secretario del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa de Ucrania, Alexéi Danílov, había calificado la lengua rusa como «un elemento de propaganda hostil» y afirmó que debe «desaparecer» del territorio ucraniano.
Asimismo, Danílov había prometido investigar a todos los ciudadanos de su país para determinar si colaboraban con Rusia. «Necesitamos encontrar a estas ratas, necesitamos envenenarlas, envenenarlas y envenenarlas. Necesitamos que ninguna de ellas se quede en nuestro territorio, porque es cuestión de seguridad nacional», destacó Danílov el pasado agosto.