En este sentido, el Sindicato de Trabajadores de Servicios Públicos y Comerciales anunció la huelga en la misma jornada, uniéndose a otros miles de empleados en varios sectores económicos que han paralizado sus labores en plena campaña de Navidad.
La medida de protesta afectará a las cabinas de pasaportes en los aeropuertos de Heathrow y Gatwick, así como en Birmingham, Cardiff, Gow, Manchester y el puerto de New Haven.
El secretario general del sindicato, Mark Serwotka, dijo que entre 2000 y 3000 empleados participarían en las huelgas del 23 a 31 de diciembre.
“Esas personas perderán su salario cuando se declaran en huelga, lo hacen como último recurso y el trabajo del sindicato es garantizar que la acción que llamamos se nota”, aclaró el jefe respecto a la razón de elegir el período de Navidad para emprender acciones laborales.
Los trabajadores británicos de varios sectores, desde abogados hasta enfermeros, conductores y personal de tierra de los aeropuertos, han realizado huelgas este año, mientras el país enfrenta su inflación más alta y la peor crisis del costo de vida en generaciones.
Hasta el momento, la demanda de los trabajadores por un aumento salarial ha sido rechazada por funcionarios del gobierno, diciendo que no puede permitirse aumentos elevados que coincidan con la inflación galopante, e incluso si pudiera, tales aumentos monetarios impulsarían aún más la inflación.
La inflación del Reino Unido se aceleró en octubre a un pico de 41 años en 11,1 % en facturas de energía y alimentos desbocadas.