Anteriormente, este diplomático señaló que Estados Unidos genera dudas acerca de su derecho a conservar el estatus de país sede de las instituciones centrales de la ONU, porque Washington cada vez con mayor frecuencia no cumple con sus obligaciones como país anfitrión.
Además, dijo que Suiza abandonó su política de neutralidad desde el inicio de la operación especial rusa en Ucrania, un hecho que no se puede obviar a la hora de tener en cuenta la posibilidad de que sea sede de esta organización internacional.
«Los suizos ya antes de febrero de 2022 eran propensos a compartir la posición de la Unión Europea en los más importantes asuntos internacionales, pero su decisión a unirse a las sanciones antirrusas de la UE puso cruz y raya en su capacidad de jugar un papel de ‘bróker honesto’. De ahí que es obvio que la Suiza de hoy es un lugar poco propicio para acoger una nueva sede de la ONU», resumió.
