La subjefa de departamento del Comité Central del Partido del Trabajo de Corea, Kim Yo Jong, hizo pública el 19 de febrero la siguiente declaración:
Si se preocupan de veras por la situación regional de la Península Coreana y desean la paz y estabilidad, ningún país debe perdonar en ningún caso el despotismo y arbitrariedades de EE.UU. que intenta convertir el Consejo de Seguridad de la ONU, que asume la importantísima responsabilidad de preservar la paz y seguridad del mundo, en un aparato de implementación de su cruel política hostil a la República Popular Democrática de Corea.
Asimismo, no se debe tolerar el acto maligno de EE.UU. y sus satélites que tratan de hacer renunciar al derecho de autodefensa de un Estado soberano y hay que hacerles conocer que eso es un intento vano.
Esta vez también, nuestros enemigos cometieron sin fundamento una abierta violación de la soberanía de la RPDC.
EE.UU. y los tipejos surcoreanos demuestran abiertamente su excesiva y peligrosa ambición e intento de tomar la supremacía militar y la posición predominante en la región de la Península Coreana reclamando a cualquier hora el disuasivo ampliado y la disposición de defensa conjunta, bajo el pretexto de prepararse para la supuesta amenaza de alguien, hecho que vulnera cada vez más la estabilidad regional y pone más peligrosa la situación.
Al dejar de engañar al mundo con el embuste de que no tiene hostilidad contra la RPDC y está abierto al diálogo, EE.UU. deberá renunciar a su necia ardid de ganar el tiempo en la mesa de conversación y parar todas las acciones amenazantes a la seguridad de nuestro Estado, así como pensar siempre con seriedad para su seguridad perspectiva incluso, sin tratar de manchar la imagen de la primera.
Les convendría a los tipejos surcoreanos pensar en cuál desgracia se buscarán si siguen portándose como ahora haciéndose «los bravos» y metiendo la nariz hasta en donde no deben.
EEUU no podrá salvarse: RPDC realiza exitoso lanzamiento de misil intercontinental
Les hago comprender a esos tontos que no va suceder el apuntamiento a Seúl con un misil balístico intercontinental.
Aun no tenemos la intención de tratarnos con ellos.
Por último, advierto bajo autorización: seguiremos de cerca, caso por caso, los movimientos del enemigo y emprenderemos la reacción equivalente y aplastantemente potente a cualquier acción hostil a la RPDC.