«Hasta la fecha, el número de muertos en esta catástrofe se ha estimado en 43.556 personas, por supuesto, es una cifra mayúscula», precisó Soylu.
El pasado 6 de febrero, dos terremotos de magnitud 7,7 y 7,6 sacudieron varias provincias del sureste de Turquía y el noroeste de Siria.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, calificó lo ocurrido como el mayor desastre natural en el país desde 1939.
El lunes pasado, se detectó un nuevo sismo de magnitud 6,4 en la provincia de Hatay, al sur de Turquía, así como de 90 réplicas posteriores en varias localidades de esta región, siendo la más fuerte una de magnitud 5,8.
El terremoto también se sintió en Siria, Israel, Líbano, Egipto y Chipre.