Las autoridades israelíes planean construir 1.000 nuevas viviendas en el asentamiento de Eli, en Cisjordania, tras el ataque de este martes en una gasolinera cercana, donde murieron cuatro personas. La medida ha sido aprobada este miércoles por el primer ministro, Benjamín Netanyahu, y los ministros de Defensa y de Finanzas, Yoav Gallant y Bezalel Smotrich.
Netanyahu, Gallant y Bezalel acordaron «el avance inmediato en la planificación de aproximadamente 1.000 nuevas unidades residenciales en Eli, adyacente al lugar donde se perpetró el atentado terrorista de ayer», anunció la oficina del primer ministro israelí en un comunicado.
«Nuestra respuesta al terrorismo es asestarle un golpe con fuerza y construir nuestro país», agregaron.
En el ataque del martes fallecieron dos jóvenes israelíes de 17 años, uno de 21 años y un hombre de 64 años. Estaban en un restaurante de hummus adyacente a una gasolinera cuando dos palestinos armados abrieron fuego, matándolos a ellos e hiriendo a cuatro personas más.
Uno de los agresores fue abatido en el lugar de los hechos por un civil israelí armado, mientras que el segundo huyó y fue muerto dos horas después por efectivos de las fuerzas especiales.
La organización palestina Hamás celebró el ataque y señaló que se había realizado en respuesta a la operación lanzada este lunes por el Ejército de Israel en la localidad cisjordana de Yenín, que dejó seis palestinos muertos.