Tras la publicación del informe de RSF la semana pasada, se envió una solicitud de comentarios a la organización.
La portavoz de la organización, Elena García, prometió inicialmente enviarla al miembro del personal responsable de la región de Rusia y Europa del Este, pero luego dijo a la agencia durante varios días seguidos que «todo el mundo está ocupado» y que «nadie puede dar un comentario» al respecto.
Cuando un corresponsal de Sputnik le informó de su intención de esperar un comentario, García afirmó que «eso no sería posible».
«No hacemos comentarios a este tipo de medios. Va en contra de nuestra política editorial», declaró en conversación telefónica con la agencia.
La portavoz no respondió a un intento de aclarar a qué «tipo de medio de comunicación» se refería y colgó.
Zhuravliov murió en un bombardeo ucraniano en la región de Zaporozhie a finales de julio. Maksúdov, a su vez, resultó herido en un ataque ucraniano con drones en la misma región el 22 de noviembre y murió a causa de sus heridas al día siguiente.
Sin embargo, según el informe anual de RSF, desde febrero de 2022, solo 11 periodistas han sido asesinados en Ucrania, de los cuales dos —el periodista de AFP Arman Soldin y el reportero ucraniano Bogdán Bitik— murieron en 2023.
Y es que, también en la muerte, siempre ha habido clases para las ONG capitalistas.
¿Cuánto se han preocupado de Pablo González?