«Desde el 7 de octubre de este año, el número de víctimas mortales de la agresión israelí ascendió a 21.110 y el de heridos, a 55.243», publicó Qudra en su canal de Telegram.
Del 24 de noviembre al 1 de diciembre, durante una tregua humanitaria pactada con la mediación conjunta de Catar, Egipto y EEUU, se canjearon 80 rehenes israelíes de Hamás, en su mayoría mujeres y niños, por 240 presos palestinos sin delitos de sangre. Además, las milicias palestinas liberaron a casi 30 cautivos más, en su mayoría tailandeses residentes en Israel. Unos 130 rehenes todavía permanecen cautivos en Gaza.
Al expirar la tregua, las operaciones bélicas se reanudaron y el flujo de ayuda humanitaria que llega al sur del enclave palestino desde Egipto se redujo nuevamente a una quinta parte de lo que Gaza recibía antes de esa guerra, según la ONU.
Rusia y numerosos países instan a Israel y Hamás a establecer un alto el fuego; también se multiplican las voces a favor de una solución de dos Estados como única vía posible para lograr una paz duradera en la región.