“Las superarmas de la OTAN, como los [sistemas de cohetes] Himars y tanques Leopard no garantizaron una contraofensiva ucraniana eficaz”, señalaron los exoficiales.
Sobre las sanciones económicas contra Rusia, los exmandos consideraron que tampoco han cambiado la situación. A decir de los autores del artículo, Moscú obtuvo una victoria contra el régimen de sanciones usando efectivamente “oro, cereales, petróleo y amigos”. Por otro lado, a Kiev le falta gente, dinero, municiones y tiempo, contrastaron.
“Occidente debe dejar de darle dinero a una persona con un agujero en el bolsillo”, escribieron.
Este 17 de enero, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski afirmó que el mundo carece de una industria de defensa capaz de contrarrestar a Rusia y que las Fuerzas Armadas de Ucrania tienen escasez de drones y bombas.
Desde el inicio de la operación militar especial rusa en Ucrania —en respuesta a la solicitud de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, para que se les prestara ayuda frente al genocidio perpetrado por Kiev—, Estados Unidos y sus aliados de la OTAN han suministrado a su aliado miles de millones de dólares en armamento, algo que ha sido tildado por Rusia como un aliciente del conflicto.
Con todo, a mediados de octubre del año pasado el presidente ruso Vladímir Putin confirmó que la contraofensiva de verano de Ucrania fue un completo fracaso.
“Con respecto al presunto estancamiento de la contraofensiva, ha fracasado por completo”, aseguró el mandatario en una entrevista con la cadena rusa Rossiya 1.
Putin reconoció al mismo tiempo que en el otro bando “vienen preparando nuevas ofensivas” en algunas direcciones. “Lo vemos, lo sabemos y reaccionamos en consecuencia”.