El máximo órgano judicial venezolano citó la víspera a tres de los postulados a las elecciones presidenciales del 28 de julio y a las organizaciones con fines políticos que los representaron en esos sufragios, número 31 en los últimos 25 años.
Al acto, amparado en el artículo 85 de la Ley Orgánica del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), al 12 y 14 del Código de Procedimiento Civil aplicables por remisión del artículo 98 de la referida Ley Orgánica del TSJ, concurrieron desde la mañana y entrada la noche todos los convocados, con la excepción de González.
La presidenta del Tribunal Supremo, Caryslia Beatriz Rodríguez, consideró “importante que conste en acta su incomparecencia y no acatamiento de la citación debida y perfectamente practicada” para que acudiera a la máxima autoridad judicial del país.
El coordinador nacional del Movimiento Primero Venezuela, José Brito, que asistió también a la cita del miércoles, calificó la ausencia de González a la primera audiencia (convocada la semana pasada) y a esta última de “absolutamente irresponsable con la paz del país y los venezolanos”.
En declaraciones a la prensa, tras su comparecencia, Brito estimó la convocatoria de ayer “importante y esclarecedora”.
Al no acudir a las dos convocatorias del TSJ, añadió, González está incurriendo en lo que en Derecho se conoce “como la contumacia y la rebeldía, lo cual puede acarrear que el Tribunal pueda ordenar un mandato de conducción”.
Explicó que no es que vaya preso, pero sí el tribunal puede “dirigir a la fuerza pública para que sea extraído y entrar en conocimiento del auto que se ventila” en este contencioso, que fuera convocado por el presidente reelecto Nicolás Maduro, el pasado 2 de agosto.
El político opositor venezolano aseveró que se trata de una rebeldía muy grande que “puede acarrear un mandato de conducción” en contra del representante de la PUD.
Insistió que se trata de un acto profundamente irresponsable con el país, de una persona que emite un comunicado y sale a esconderse, cuando la nación está reclamando presentar elementos que contribuyan a resolver el contencioso por la vía de la paz, la racionalidad y el sosiego, y “por eso lo denunciamos”.
“Hay que dejar el leguleyerismo y apelar a la hermenéutica jurídica para tratar de justificar lo injustificable ante el país”, expresó, y aseguró que el TSJ “es la instancia para resolver esta situación”.
González publicó la víspera un mensaje a través de las redes sociales, en el cual expresó que si acudía al TSJ “en estas condiciones estaré en absoluta vulnerabilidad por indefensión y violación del debido proceso”.
Los partidos y movimientos políticos que conforman la PUD acudieron ayer al máximo órgano judicial y no presentaron las pruebas ni actas que justificarán su presunta victoria en las elecciones presidenciales, porque según el líder político Manuel Rosales ya las habían publicado en un portal web.
En un encuentro con agricultores urbanos, productores, campesinos y pescadores en el Palacio de Miraflores, sede del Gobierno, el presidente Nicolás Maduro reveló anoche, sin embargo, que los tres líderes políticos que apoyaron a la PUD reconocieron ante el TSJ la farsa.
Rosales por Un Nuevo Tiempo; José Luis Cartaya, por la Mesa de la Unidad Democrática, y Simón Calzadilla, en representación del Movimiento Por Venezuela, fueron los primeros en acudir a la citación del máximo órgano judicial.
“Ante la justicia quedó grabado y reconocieron que no tienen actas, que no tienen nada, que es una farsa”, comentó Maduro.
Reafirmó que ellos “reconocieron mil cosas que no voy a repetir…quedó grabado y firmado”, y luego salieron a “pegar cuatro gritos” ante los micrófonos de la prensa.
Los tres partidos «reconocieron judicialmente que no tienen nada, que es mentira todo lo que ellos han sostenido públicamente», recalcó.