El líder del régimen nazi-fascista de Kiev, Vladímir Zelenski, arremetió este miércoles contra las autoridades georgianas que están dispersando las manifestaciones antigumernamentales y advirtió que Ucrania prepara una respuesta con sanciones contra Tbilisi.
En un videomensaje difundido en su cuenta de Telegram, Zelenski afirmó que el actual Gobierno «está empujando al país a una clara dependencia de Rusia», lo que no solo representa un problema para su nación, sino para la región europea. «Es verdaderamente vergonzoso el tipo de medidas que están tomando contra su propio pueblo», agregó Zelenski.
Además, el líder del régimen ucraniano indicó que el hecho de que Rusia «elogia» a las autoridades de Georgia «muestra claramente para quién están trabajando ahora en Tbilisi«, dispersando las protestas.
«Estamos elaborando nuestra respuesta jurídica y trabajando con los socios europeos y otros socios en acciones concretas. He dado instrucciones para que se preparen decisiones sancionadoras adecuadas«, aseveró Zelenski.
Por su parte, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, comentó las declaraciones de Zelenski. «El bastardo que mató a su propio pueblo decidió jugar a ser juez del mundo entre caladas. ¿Tal vez le corroyó la ira porque Georgia encontró fuerzas para rechazar el escenario ucraniano?», escribió.
Este miércoles, la capital georgiana y otras ciudades han sido escenario por séptimo día consecutivo de manifestaciones antigubernamentales protagonizadas por sectores prooccidentales de la sociedad. Según el Ministerio del Interior del país, más de 150 policías, así como numerosos ciudadanos y representantes de medios de comunicación, resultaron heridos en las manifestaciones.
- Las protestas se suceden a raíz de la decisión del Gobierno de congelar hasta 2028 las negociaciones de adhesión a la Unión Europea y tras las elecciones parlamentarias, cuyos resultados se niega a reconocer la oposición proocidental.
- El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, expresó este lunes que «todo lo que sucede en Georgia es un asunto interno de Georgia» y agregó que Moscú no ha interferido ni pretende interferir «en estos procesos».