«En Siria, más de 1,1 millones de personas, en su mayoría mujeres y niños, han sido desplazados en Siria desde la escalada de las hostilidades el 27 de noviembre, según el grupo de trabajo sobre personas desplazadas. Casi 640.000 personas huyeron de Alepo, 334.000 de Idleb, y 136.000 de Hama», informó la entidad en un comunicado.
El pasado 27 de noviembre, una amplia coalición de grupos armados de la oposición siria lanzó una ofensiva sorpresa a gran escala contra el Ejército regular desde el noroeste del país.
En menos de dos semanas, las fuerzas antigubernamentales se hicieron con el control de varias ciudades importantes como Alepo, Hama y Homs y entraron el 8 de diciembre pasado en la capital, Damasco, donde proclamaron la caída del presidente Bashar Asad, que ejercía el cargo desde el año 2000, tras la muerte de su padre, Hafez Asad, que había gobernado Siria durante las tres décadas anteriores.
El exmandatario sirio huyó a Rusia, donde se le otorgó asilo.
La ofensiva relámpago contra Asad fue liderada por el grupo Hayat Tahrir al Sham (HTS, anteriormente Frente al Nusra, organización prohibida en Rusia por terrorista).
Las facciones armadas que tomaron el poder en Siria encomendaron la formación de un gabinete de transición a Mohamed Bashir, hasta hace poco jefe del autoproclamado Gobierno de Salvación Nacional.