«Quiero enfatizar que en el mundo turbulento de hoy nos hemos convertido con nuestros amigos chinos no solo en correligionarios políticos que defienden el fortalecimiento de las bases democráticas policéntricas en la gobernanza global, sino también en garantes de la estabilidad estratégica en todo el planeta», comentó el embajador.
Morgúlov remarcó que esto sería «la dimensión histórica más importante de la asociación entre Rusia y China».
A principios de este mes, el presidente de China, Xi Jinping, destacó el rol de su país y de Rusia para defender de manera conjunta la estabilidad estratégica global y la justicia mundial.
El mandatario chino apostó también por la cooperación entre los dos países en el seno de mecanismos multilaterales como la ONU, los BRICS y la Organización de Cooperación de Shanghái.