En un comunicado sobre declaraciones divulgadas en páginas y plataformas del Estado del Vaticano relacionadas con Nicaragua, la cancillería las calificó como un agravio y un insulto a la soberanía y dignidad de este país centroamericano.
“Son irresponsables e irrespetuosas y violentan las máximas leyes y normas que rigen la vida independiente de nuestra Nicaragua Bendita”, destacó el escrito.
Añadió que, sin ninguna autoridad política supranacional, el Vaticano pretende disponer sobre cargos y poderes que otorgan aquí a personas que dejaron de ser nicaragüenses por conductas impropias e intolerables de promoción de crímenes políticamente instigados.
Además de constantes llamados a romper la paz con todo tipo de violencia, falsedades y planificadas calumnias, infringiendo angustias, sufrimiento y dolor a las familias de nuestro país, enfatizó el documento.
En ese sentido, condenó dichas “conductas inadmisibles” de personas que, desde tronos ególatras, con disfraces y máscaras de benevolencia y farisaico misticismo, continúan agrediendo al pueblo nicaragüense en su pretensión de poder político violando todos los derechos.
Según la Cancillería, esos individuos rompieron el sagrado deber de todos los ciudadanos de este país, de custodiar y preservar soberanía, seguridad, paz y trabajo digno de cada persona.
“Desde púlpitos y tronos vacíos, esos falsos profetas y mercaderes, desconocen a Cristo y sus doctrinas de amor y concordia, legado profético a la humanidad, como patrimonio de esperanza, convivencia dialogante, tolerante y pacífica, entre hermanos”, subrayó.
El pronunciamiento señaló que nada autoriza al Vaticano, que debe regirse por las normas del Derecho internacional y el respeto a los gobiernos e instituciones nacionales, a otorgar nombramientos de cualquier tipo en el territorio soberano y digno de Nicaragua.
“Toda conducta jurídicamente inadmisible, y por lo tanto ilícita e ilegal, se considera ofensiva a la dignidad, decoro y libertades de nuestro pueblo, que vive, no sólo según las leyes humanas, sino según los principios, valores y prácticas del cristianismo verdadero”, manifestó.
El mensaje aludió a la defensa del pueblo nicaragüense de su vida soberana y pacífica a través de los siglos, al tiempo que afirmó que las referidas conductas en nada difieren de comportamientos y prácticas de ideologías fascistas, proimperialistas, y no serán aceptadas ni aplaudidas por Managua.
“A nombre de todos los mártires, los muertos que las prácticas innobles del Estado Vaticano, han generado en el mundo entero, exigimos respeto a la vida, a la armonía, a la conciencia alzada, y a la sacrosanta espiritualidad propia, activa, creativa y beligerante de un pueblo que ni se vende, ni se rinde, jamás”, concluyó.