La primera reunión de los jefes negociadores del grupo BRICS (denominados sherpas) se llevará a cabo entre los días 25 y 26 de febrero en el Palacio de Itamaraty, en Brasilia, bajo la presidencia brasileña. Los sherpas son los enviados especiales de los jefes de Estado y de gobierno de los miembros del grupo, y entre otros asisten Rusia, India, China, Sudáfrica, Arabia Saudita, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Etiopía, Indonesia e Irán.
Durante la inauguración del encuentro, el canciller brasileño, Mauro Vieira, destacó las agendas históricas del bloque, como la promoción de mecanismos financieros alternativos y la reforma de las instituciones multilaterales de gobernanza global, en aras de incluir las necesidades del Sur Global y enfrentar el proceso de desglobalización: «Resistir esta fragmentación y abogar por un sistema de comercio multilateral abierto, justo y equilibrado«.
Frente a esta realidad internacional, el canciller aseguró que en un mundo convulsionado por las crisis sistemáticas y tensiones geopolíticas el bloque debe asumir la construcción de un verdadero nuevo orden mundial: «Un mundo multipolar no es sólo una realidad emergente. Es un objetivo compartido», enfatizó el funcionario.

El jefe de la diplomacia brasileña evaluó que los principios del multilateralismo están siendo puestos a prueba por la fragmentación internacional e instituciones como el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) se dedican a intentar adaptarse a los cambios en la política global.