Un novedoso avión de combate chino de sexta generación que causó revuelo internacional tras su repentino avistamiento por primera vez a finales del año pasado llevó a cabo un exitoso segundo vuelo de prueba este mes, según confirmaron varios observadores de defensa.
El experto en aviación militar moderna china Andreas Rupprecht compartió este lunes videos e imágenes que muestran una aeronave con características aerodinámicas muy distintivas: sin cola y con un diseño de ala doble delta, es decir, en forma de triángulo.
Aunque los detalles técnicos son escasos desde su vuelo inaugural en diciembre, y hasta el momento las autoridades chinas no se han pronunciado oficialmente al respecto, los analistas han designado provisionalmente a esta aeronave como J-36, recoge la revista en línea estadounidense Defense Blog.
Al respecto, el medio Clash Report señala la presencia en este modelo de tras motores turbofán «posiblemente WS-10C o futuros WS-15 para un mejor rendimiento». Esto «insinúa un potencial de alta velocidad y largo alcance», sugiere el bloguero Mario Nawfal.
«Aunque los detalles precisos sobre las capacidades del J-36 siguen siendo confidenciales, el diseño observable de la aeronave sugiere que podrá transportar municiones guiadas avanzadas, incluyendo misiles antibuque y misiles aire-tierra de precisión», comenta Defense Blog.
La revista añade que su apariencia furtiva, que se asemeja a la de un caza, sugiere capacidades de sigilo avanzadas, encaminadas a minimizar el reflejo de las señales de radar y a hacerlo menos detectable. Por otro lado, afirma que este nuevo avión podría reemplazar la flota china de bombarderos JH-7, que entró en servicio en la década de 1990. También lo han comparado con el Su-34 ruso, un avión de ataque táctico actualmente activo. Por tanto, podría desempeñar un papel operativo similar dentro de la Fuerza Aérea China.
