Datos del Departamento de Agricultura confirman que China canceló 12 mil toneladas métricas de carne de cerdo en medio de este conflicto comercial sin solución aún entre las dos economías más grandes del planeta.
Esta anulación de pedidos del gigante asiático, uno de los principales socios comerciales de Estados Unidos, es la mayor desde que la pandemia de la Covid-19 interrumpió las cadenas de suministro y paralizó las economías a nivel global, destacan medios locales.
China, después de México y Japón, fue el tercer mayor mercado de carne de cerdo de Estados Unidos en 2024, importando unas 475 mil toneladas métricas valoradas en más de mil 100 millones de dólares.
Con su injustificada guerra comercial -a juicio de no pocos observadores- que sacudió los mercados, Trump impuso un arancel base universal y otros más drásticos para decenas de países.
En especial llevó hasta el 145 por ciento las tarifas a los productos chinos que entran a Estados Unidos, lo que provocó la contramedida del 125 por ciento que el país de Asia le puso a los bienes de la nación de Norteamérica.
Esta semana, Trump insinuó que reduciría los aranceles a las importaciones chinas. El martes, declaró a la prensa en el Despacho Oval que los aranceles astronómicos sobre los productos chinos “se reducirán sustancialmente” y prometió ser “muy amable” en la mesa de negociaciones.
El gobernante afirmó este jueves que estaba en conversaciones con Beijing para alcanzar un acuerdo comercial, pero China lo niega.
Beijing advirtió que Estados Unidos inició las subidas arancelarias unilaterales y si realmente quiere resolver el problema, debería escuchar las voces racionales de la comunidad internacional y de sus propios actores nacionales.
Además, subrayó que Washington tendría que levantar por completo todas las medidas arancelarias unilaterales contra China y encontrar la manera de resolver las diferencias mediante un diálogo equitativo.