En su sede en El Vedado capitalino, la directora Anne Lemaistre ofreció un balance que destacó a Transcultura como el programa de mayor envergadura de esta oficina en Latinoamérica, con acciones de promoción de emprendimientos, intercambio y cooperación, el turismo sostenible y la creación del Polo Caribeño de Formación Cultural.
Centrada en la juventud, esta iniciativa financiada por la Unión Europea se estructura en dos ámbitos de acción complementarios: contribuir a la profesionalización de los sectores cultural y creativo, y generar nuevas oportunidades para el desarrollo socioeconómico y la cooperación en esta zona geográfica y con Europa.
Lemaistre precisó que en Cuba durante el año anterior realizaron talleres y gestiones de apoyo enfocados en la participación de jóvenes en festivales, talleres sobre patrimonio y en el marco del Festival de cine medioambiental Isla Verde, eventos de moda, capacitaciones y cursos presenciales.
También mencionó la contribución a la accesibilidad, con participación de la comunidad, a sitios patrimoniales como la Plaza Vieja de La Habana, entre otras acciones de conjunto con la Oficina del Historiador de la Ciudad y otros respaldos.
Refirió la revitalización de la red de escuelas asociadas a la Unesco para promover la educación transformadora, el desarrollo ético e inclusivo de la Inteligencia Artificial en Cuba, el apoyo al sector mediático para la respuesta a emergencias y desastres.
La directora de la Oficina Regional de la Unesco en La Habana mencionó además el aporte a la reducción de riesgos de desastres en infraestructuras en la isla, y la respuesta a emergencias con el paso de dos huracanes y el impacto de dos sismos. En presencia de representantes de numerosas organizaciones, colaboradores, instituciones y demás asociados en el trabajo conjunto, Lamaistre agradeció a todos por contribuir al logro de los positivos resultados.