Los 32 miembros de la OTAN gastaron en total 1,303 billones de dólares en su defensa el año pasado, superando las previsiones, y 22 miembros cumplieron el objetivo del 2% del PIB.
Las cifras publicadas el jueves por la alianza militar occidental muestran niveles récord de gasto entre sus miembros, con un total de 468.000 millones de dólares (412.000 millones de euros) en Europa y Canadá, el 38% de los cuales se destinó a la compra de grandes equipos.
Los socios europeos se han comprometido a aumentar el gasto militar en el contexto de la guerra de Ucrania, sobre todo a instancias del entonces, y ahora de nuevo, presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que amenazó con no ayudar a quienes no invirtieran más en defensa.
La nueva postura de Washington en materia de defensa en Europa, ahora en repliegue, ha presionado a los rezagados para que redoblen sus promesas.
Según los datos de la Alianza, la mayor parte del dinero se destina al flanco oriental: la zona fronteriza con Rusia, los países bálticos y Polonia. Grecia se mantiene como uno de los grandes inversores en defensa.