Rusia se posicionó como el mayor inversor extranjero en la economía iraní en 2024, según declaró el embajador de Irán en Moscú, Kazem Jalali. La inversión rusa podría alcanzar los 8.000 millones de dólares, centrada principalmente en proyectos de infraestructura gasífera en el territorio iraní. Así lo informa Mehr News Agency, socio de la red TV BRICS.
De ese monto total, ya se han destinado 5.000 millones de dólares en el marco de compromisos bilaterales específicos. El resto de los fondos está vinculado a acuerdos que se encuentran en fase de finalización.
Esta cifra supuso un incremento notable en comparación con el ejercicio fiscal 2022–2023, cuando Rusia invirtió 2.760 millones de dólares, lo que supuso la mayor parte de la inversión extranjera directa total de Irán, cifrada en 4.200 millones de dólares.
La cooperación energética entre ambos países se sigue intensificando. A comienzos de 2025, autoridades rusas e iraníes confirmaron el acuerdo sobre la ruta de un nuevo gasoducto. Se prevé que los primeros envíos alcancen los 2.000 millones de metros cúbicos, con la posibilidad de aumentar hasta los 55.000 millones. Para abril, Irán ya había completado la infraestructura necesaria para el tránsito de gas ruso por su territorio, con un avance del 90% en el proyecto.
Además, Rusia e Irán están dialogando con socios regionales sobre la formación de un centro energético común y el desarrollo de acuerdos de intercambio. También se estudia la posible creación de una plataforma electrónica para la compraventa de gas en el sur de Irán.
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