Según informó el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores, Fabio Arias, la acción tiene por objetivo pedirle a la plenaria del órgano senatorial que desista de “seguir aprobando medidas regresivas”.
El líder sindical planteó que la intención es defender una reforma que recupere derechos para los trabajadores y no que se los quite.
“La invitación es que estemos desde las 10:00 (hora local) para presionar muy fuertemente. Ese día se define la suerte de la reforma laboral. Estemos presentes la mayor cantidad de tiempo ese día en la Plaza de Bolívar”, pidió Arias.
Durante esta jornada se reanudará la discusión del proyecto de ley que ya cuenta con 57 artículos aprobados y uno negado.
Todavía quedan pendientes otros 19 por discutir, aproximadamente un cuarto del total y las cuestiones más peliagudas hasta el momento, como el horario de inicio de la jornada nocturna, la posibilidad de que se trabaje cuatro días y se descanse tres, y que los festivos puedan tener un recargo del 100 por ciento.
Otro tema delicado es si los integrantes del Servicio Nacional de Aprendizaje pueden tener un contrato de trabajo, y están asimismo las proposiciones de artículos nuevos, como que se prohíba el contrato sindical, o que se retome la licencia de paternidad.
“Faltan los temas álgidos, las líneas rojas del Gobierno, lo que nosotros consideramos que no puede ser negociado si queremos, de verdad, entregar una reforma laboral”, declaró el ministro del Trabajo, Antonio Sanguino.
El debate transcurre, mientras el país vive una fuerte polémica en torno a la firma de un decreto del presidente Gustavo Petro para convocar a una consulta popular, en caso de que el proyecto que apruebe el Senado no respete lo que el Gobierno estima son cuestiones de vital importancia para la clase obrera.
De acuerdo con el mandatario, el pueblo es el constituyente primario y ningún otro poder está por encima de ese.
Además, el gobernante ve en el ejercicio de participación el único vehículo eficaz para sortear los bloqueos legislativos que anulan el avance de reformas sociales.
El análisis de la ponencia que ahora se discute deberá concluir antes del próximo viernes, fecha en la que culmina la actual legislatura, o se hundirá por falta de trámite.
