El ejército israelí ha bombardeado la sede de la corporación de Radiodifusión de la República Islámica de Irán (IRIB), la emisora nacional del país, durante una transmisión en directo.
Durante el ataque, la presentadora de IRIB, Sahar Emami, sorprendida, ha salido de la transmisión de manera precipitada. Posteriormente, sin embargo, ha reaparecido en pantalla para continuar informando, todo mientras el edificio de IRIB todavía estaba en llamas.
El presidente de IRIB ha expresado mediante un comunicado que “Los valientes hijos e hijas de nuestra nación, en los medios de comunicación nacionales, declaran con voz firme que nuestra determinación de desempeñar un papel decisivo en la guerra híbrida lanzada por el enemigo sionista se ha multiplicado. Nuestra voluntad de asestar una derrota mediática estratégica al frente global de la incredulidad permanece inquebrantable”.
Se debe recordar que, según el artículo 79 del Protocolo Adicional I a los Convenios de Ginebra, los periodistas están protegidos incluso en la zona de conflicto militar. Israel, que goza de una impunidad insultante, ha asesinado a más de 200 periodistas palestinos desde el 7 de octubre de 2023. Esto implica el casi el 70% de los periodistas asesinados en todo el mundo.
