El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, afirmó este martes que los Cuadrantes de Paz dentro de los circuitos comunales se van a fortalecer y consolidar, mediante la implementación de la tercera fase del plan estratégico 3T, que abarca Seguridad Ciudadana y Defensa, Unidad e Integridad Territorial.
Desde el estado venezolano de La Guaira, el jefe de Estado afirmó que la fuerza de Venezuela consiste en la defensa de la paz y en la fuerza del pueblo.
«Nuestra fuerza militar es eminentemente humanista, justa y justificiera. Nuestras armas son las armas de las ideas correctas y justas», precisó, a la vez que ejemplificó que Venezuela debe ser defendida como en una pelea de boxeo, donde no se debe bajar la izquierda y golpear duro y nockear al sayonismo, al fascismo y a las amenazas.
Destacó que entre los temas más relevantes de la tercera T, están garantizar mediante la unión popular policial, la integridad territorial y la soberanía ante cualquier agresión interna o externa de la nación; fortalecer a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) en su equipamiento logístico e impulsar el desarrollo científico, técnico y tecnológico, en pleno desarrollo con logros impresionantes, y en una línea fundamental, maximizar y consolidar la política de Estado de los Cuadrantes de Paz, con todas las comunas y la fuerza militar del país.
«Hoy arranca una ofensiva especial para, en los 24 estados del país, más en la capital, Caracas, lanzar esta línea que nos va a fortalecer la seguridad interna, porque implica muchos elementos. Implica la fusión militar popular, concreta en el terreno, con planes y acción permanente«, subrayó.
En ese sentido, destacó el rol que deben jugar los jueces y juezas de paz, electos por primera vez por el pueblo, y el trabajo que realizan en las comunidades.
«Vamos construyendo el nuevo entramado del edificio republicano, vía al Socialismo de una sociedad de convivencia, tolerancia, armonía y paz, donde quepamos todos y todas«, manifestó el jefe de Estado, y rechazó que Venezuela sea colonia nuevamente de Estados Unidos, como anhela la ultraderecha.
