
El primer ministro eslovaco, Robert Fico, ha vuelto a arremeter contra el régimen de Kiev por sus ataques contra infraestructura petrolera ubicada en territorio ruso, provocando así la suspensión del suministro del crudo a su país.
«Hay situaciones que, si vuelven a ocurrir, protestaremos con firmeza. Por ejemplo, no nos entendimos en absoluto sobre los ataques a la infraestructura petrolera en el territorio de la Federación de Rusia«, manifestó este sábado.
Fico recordó que Vladímir Zelenski «ha dicho repetidamente que, si Rusia ataca la infraestructura energética en Ucrania, [él también] tiene derecho a atacarla. Y mi respuesta es que eso solo nos perjudica. No se pueden proteger los propios intereses nacionales perjudicando a otros. Eso simplemente no funciona», aseveró.
«Aquí es simplemente evidente que Ucrania, al librar la guerra, no considera los intereses de otros países. Y no reconozco este principio, porque quiero repetirlo. Todos tienen el derecho a proteger sus propios intereses y promover intereses nacionales-estatales, pero no puede hacerlo a costa de perjudicar a otros países, claro está. Este es un tema en el que, por ejemplo, no llegamos a un acuerdo absoluto«, concluyó.
Bratislava no participará en «juegos» en lo que respecta a la energía
Previamente, Fico se pronunció acerca de su reciente reunión con Zelenski, indicando que mantuvo con el jefe del régimen ucraniano una «conversación muy amplia sobre temas energéticos», y destacó que los dos países tienen «puntos de vista diametralmente opuestos» sobre el asunto.
«He dicho que respeto el punto de vista del señor presidente, pero espero que ustedes también respeten nuestros puntos de vista», subrayó. El jefe del Gobierno eslovaco enfatizó que hay que «tener en cuenta los intereses de otros países que forman parte de la red energética internacional». Además, manifestó que su país no quiere participar en «juegos en lo que respecta a la energía». «Bratislava tomará todas las decisiones en materia energética que sean beneficiosas para la política soberana eslovaca«, indicó.
Amenaza a la seguridad energética
La reunión se produjo unas semanas después que el régimen de Kiev perpetrara, a finales de agosto, varios ataques contra la infraestructura del oleoducto Druzhba en territorio ruso, lo que provocó la suspensión del suministro de petróleo a Hungría y Eslovaquia.
Las autoridades de ambos países criticaron fuertemente los ataques ucranianos y aseguraron que no quedarán sin consecuencias. Además, presentaron una queja ante la Comisión Europea, subrayando que «las acciones de Ucrania, que amenazan gravemente la seguridad energética de Hungría y Eslovaquia, son completamente inaceptables». Entre tanto, Zelenski se tomó a burla las consecuencias de los ataques contra el oleoducto.
La rama sur del oleoducto Druzhba, que atraviesa Ucrania, transporta crudo ruso hacia Hungría y Eslovaquia, mientras que el ramal norte, que abastecía a Polonia y Alemania, fue cerrado por las sanciones europeas.
