
El 9 de septiembre de 1948 fue fundado por el gran Líder, camarada Kim Il Sung, por primera vez en la historia nacional de cinco milenios, un Estado popular donde el pueblo se hace el dueño del Poder, su voluntad se determina como política estatal y se defienden sus derechos en virtud de la ley nacional, la República Popular Democrática de Corea.
En el período de la lucha revolucionaria antijaponesa, el Presidente Kim Il Sung presentó la autóctona línea de construcción del Poder y aclaró en el «Programa de Diez Puntos de la Asociación para la Restauración de la Patria» la tarea de establecer el verdadero gobierno del pueblo coreano luego de acabar con la dominación del imperialismo japonés mediante el frente unido antijaponés.
Aunque el país fue liberado de la dominación colonial de los imperialistas japoneses en agosto de 1945, era literalmente un teatro de los que se autodenominaban “revolucionarios” y “patriotas”.
Algunos insistieron en la recuperación del sistema feudal, el establecimiento de una república burguesa y otros abogaban por la opción inmediata del socialismo.
Percatándose de la situación complicada, el camarada Kim Il Sung convocó el 10 de octubre de 1945 el congreso fundacional del Partido, en el cual definió como la línea política fundamental en esa etapa fundar una república popular democrática y desarrollar el país como un Estado democrático, próspero y poderoso, soberano e independiente.
El Gobierno Revolucionario Popular establecido en las bases guerrilleras dio origen a la construcción del nuevo Estado centrado en las masas populares. Instituyeron los comités populares locales de todos niveles tras eliminar completamente los órganos de dominación colonial del imperialismo japonés, y concedieron prioridad a armar a las masas populares con la línea del Partido sobre la construcción del país.
Gracias a la fundación de la RPDC, el pueblo coreano hecho dueño del país, la fábrica y la tierra, puede disfrutar de la vida auténtica.
La guerra coreana de la década 1950 contra la invasión armada del imperialismo acaudillado por Estados Unidos se concluyó con la victoria del pueblo coreano gracias al gran Líder quien lo orientó a pelear con los métodos autóctonos de combate, convenientes a la realidad y las condiciones topográficas de nuestro país.
Aunque el conflicto terminó en 3 años, perdura durante más de 70 años la guerra sin tiroteos ni cañonazos, impuesta por el imperialismo.
Gracias a que el gran Líder condujo con acierto la construcción de la Patria poderosa y próspera, bajo la bandera de la independencia, el pueblo llevó a cabo la causa histórica de la industrialización socialista en apenas 14 años, en la difícil circunstancia en que todo estaba reducido a cenizas debido a la guerra, y se abrió en Corea la era de gran prosperidad de la edificación socialista en las décadas de 1970 y 1980.
A mediados de la década de 1990, cuando el destino de Corea y del socialismo se enfrentaba al grave desafío, el gran General, camarada Kim Jong Il alzó la bandera de Songun, que presenta al Ejército Popular, fuerzas armadas para defender el país, como el grueso de la revolución que desempeña el papel de vanguardia en la construcción socialista también. El ejército es la vanguardia y brigada de choque destinada a abrir el camino de avance al frente de las masas populares y exhortarlas a la lucha heroica por llevar adelante la revolución y la construcción con la fuerza unida del ejército y el pueblo.
Gracias a su dirección de la revolución Songun, el Ejército Popular de Corea se preparó como invencibles fuerzas armadas revolucionarias sin rival y la Corea socialista se convirtió en el país fabricador del satélite artificial de tierra y poseedor de las armas nucleares. Por haber defendido la dignidad y el honor del socialismo y del pueblo, desbaratando a cada paso las maniobras de los imperialistas y otros reaccionarios, la RPDC se hizo el foco de la época.
En diciembre de 2012, el estimado camarada Kim Jong Un expresó la firme decisión y compromiso de convertir la patria en la mejor potencia y paraíso del pueblo, envidia todo el mundo, enarbolando la bandera del Juche.
En la trayectoria de la dirección sobre la revolución, presentó, profundizó y desarrolló la idea y teoría en materia de la construcción del Estado Kimilsungista-Kimjongilista y abrió la época de dar primacía a nuestro Estado y el ancho camino para la construcción de potencia socialista.
Se levantaron en todas las localidades del país las creaciones monumentales como las fábricas modelos, se efectuaron as ceremonias del inicio de construcción de decenas de miles de viviendas y se proclamó con solemnidad el inicio de la revolución de la industria local.
En su discurso pronunciado en septiembre del año pasado, Kim Jong Un dijo que la fuerza poderosa es precisamente la paz auténtica y la garantía absoluta del desarrollo de nuestro Estado y que se necesita fortalecer incesantemente la capacidad de ejecución de guerra del ejército para enfrentar de modo activo al ambiente de la seguridad regional y defender con una fuerza poderosa la soberanía y seguridad del Estado, lo cual constituye el asunto de suma importancia para el Partido y el gobierno y la primera tarea de la revolución, enfatizó.
Hoy en día, bajo sus medidas prácticas, Corea avanza para ampliar lo más pronto posible el cimiento ideal y sólido de la prosperidad integral del socialismo y avanza firmemente con tal amor hacia el futuro del comunismo, al mantener firmemente la tendencia al ascenso de desarrollo estatal adquirida con el espíritu revolucionario de la autosuficiencia y la autodeterminación.
Baile, fuegos artificiales y fútbol femenino por el 77º aniversario
Con motivo del día de la fundación de la RPDC, tuvieron lugar la ceremonia de izada de la bandera nacional, la velada de jóvenes y estudiantes y el lanzamiento de fuegos artificiales, el partido de fútbol femenino entre el equipo 25 de Abril y el Pyongyang en el Estadio Kim Il Sung y el encuentro de los jóvenes y estudiantes con ameritados.
Muchos obreros recibieron el Premio de Honor al Obrero Ejemplar