Las fuerzas de ocupación israelíes incrementaron este miércoles sus actividades en el sur de Siria, con nuevas incursiones en zonas rurales de la gobernación suroccidental de Quneitra.
Según reportes de la televisión Syria TV, una patrulla israelí compuesta por dos vehículos todoterreno ingresó en la localidad de Brega, donde estableció un puesto de control y procedió a registrar a residentes y transeúntes. La medida restringió la libre circulación de civiles y generó preocupación entre la población local.
Aunque no se reportaron detenciones, se desconocen las razones detrás de la presencia militar israelí en la zona, considerada una violación del derecho internacional y de la soberanía siria.
La acción de hoy sigue a una serie de movimientos similares efectuados la víspera por las tropas de Tel Aviv, que incursionaron en las localidades de Al-Ajraf y Al-Samadaniya Al-Sharqiya.
Asimismo, efectivos israelíes detuvieron brevemente un minibús con civiles a bordo en la carretera de Jabata Al-Khashab, en la misma Quneitra, y los liberó poco después sin explicación alguna.
Por otro lado, persiste la preocupación por el destino de tres jóvenes de la gobernación de Daraa, arrestados el pasado 4 de octubre durante una redada israelí en la localidad de Jamla. Los detenidos fueron identificados como Muhammad Mahna al-Baridi, Muhammad Turki al-Samuri y Mahmud Mazid al-Baridi.
Desde entonces, no se ha proporcionado información oficial sobre su paradero ni sobre las condiciones de su detención, situación que sus familias denuncian como una desaparición forzada.
Horas antes, una fuerte explosión sacudió zonas rurales de Quneitra y Daraa, coincidiendo con el sobrevuelo de aeronaves israelíes en la región. Medios oficiales vinculan esta detonación con maniobras militares a gran escala iniciadas por Tel Aviv en la región de Galilea y el Golán ocupado, zonas limítrofes con el Líbano y Siria.
Las maniobras, en las que participan aviones de combate, drones, buques de guerra y unidades terrestres, forman parte de un ejercicio militar que incluye simulacros con fuerzas enemigas. Estas acciones aumentan la tensión en una región ya afectada por años de conflicto y ocupación.
Siria denunció reiteradamente ante las Naciones Unidas las violaciones de su soberanía por parte de “Israel”, y exigió el fin de la ocupación en el Golán y el respeto al derecho internacional.
Prensa Latina / Al Manar
