
De acuerdo con el ministro de Energía, Mohammad Al-Bashir, se culminaron los trabajos de rehabilitación que permiten retomar la producción con una capacidad anual de un millón 200 millones de toneladas.
El titular destacó que la reapertura constituye un paso significativo para fortalecer la presencia de Siria en el mercado internacional del fosfato y respaldar la recuperación económica del país.
Subrayó asimismo que la reactivación de la planta contribuirá a dinamizar los sectores energético y de recursos minerales.
Al-Bashir resaltó el esfuerzo de la fuerza laboral nacional y de los trabajadores del sector, y recordó que este avance forma parte del plan estatal destinado a modernizar la infraestructura y promover proyectos considerados estratégicos para el desarrollo del país.
La planta figura entre las más importantes de Siria y la región de Oriente Medio debido a la reconocida calidad del fosfato sirio, lo cual facilita su exportación y refuerza el reposicionamiento de Siria como actor destacado en este sector.
El sector del fosfato sigue siendo uno de los pilares de la riqueza mineral de Siria, y la rehabilitación de la planta se inscribe en la estrategia gubernamental para reactivar instalaciones dañadas durante la guerra y fortalecer la infraestructura de un sector considerado vital para la economía nacional.

