Ayer tarde (por el jueves) desde la Subdelegación del gobierno en Cádiz hasta la plaza Argüelles donde está la estatua de Francisco Miranda –el primer venezolano universal- pasando por el barrio de Santa María y todo el centro urbano de la capital, se celebró una manifestación nutrida de militantes solidarios y solidarias con el gobierno bolivariano de Venezuela y su Revolución.
Con gritos como “No pasarán los fascistas en Venezuela” o “Chávez vive…la lucha sigue”, más de un centenar de personas llegadas también desde El Puerto de Santa María, desde Sanlúcar de Barrameda (y la dignidad de sus mujeres que ocupan y resisten) y desde Málaga, festejamos la solidaridad y el amor por el pueblo bolivariano y su digna resistencia a la barbarie del capital y sus cómplices.
Después de los saludos afectuosos de las organizaciones y personas asistentes…la Plataforma Bolivariana de Cádiz Francisco de Miranda, la sección sindical del SAT de Navantia San Fernando, la Unión local del SAT de Cádiz y Sanlúcar, el PCE de Cádiz, compañeras de las corralas de Sanlúcar, compañeros de la “Mesa por el Empleo de Cádiz y la Bahía”, compañeros de El Movimiento en lucha contra el desempleo y la exclusión social de Cádiz, compañeros y compañeras venidos desde Málaga, etc.
Contamos además con la “presencia” en directo de la voz, el discurso y el ánimo combatiente del Embajador de Venezuela Mario Isea. En llamada telefónica conectada a nuestro pequeño altavoz se pudo conectar la presencia del Gobierno bolivariano aquí, con su discurso de revolución y de esperanza, con la militancia solidaria de muchos hombres y mujeres que no se resisten a la barbarie del capitalismo y su barbarie imperialista allí ni aquí.Se pudo conectar el poder popular y su propuesta de futuro.Y hubo muchos abrazos y alegría.
Plataforma bolivariana de Cádiz, Francisco de Miranda.
Nota de blog. Se produjo una escena simpática al paso de la manifestación por la Plaza del Ayuntamiento. En ese lugar había un grupo de niños sevillanos que estaban de excursión en la ciudad. Sin que nadie los empujara a ello (nosotros no manipulamos niños) aquellos pequeños comenzaron a gritar «el capitalismo es terrorismo» al unisono con los lemas de los manifestantes. Incluso uno de ellos levantó el puño con un rostro de seriedad que impresionaba. Es obvio que este pequeño mamaba socialismo en su casa.
