Cualquier acción militar de EE.UU. contra Irán desembocaría en un conflicto a gran escala, con implicaciones para la región y todo el mundo, declaró a Newsweek la Misión Permanente de Irán ante las Naciones Unidas.
«Desde la perspectiva de Irán, el uso de la opción militar a cualquier nivel significa la entrada de EE.UU. en una guerra», subrayaron desde la legación diplomática, agregando que Teherán «considera por ahora que esa posibilidad es débil».
Asimismo, la misión indicó que «si EE.UU. calcula mal e inicia una guerra», las «consecuencias para la región y el mundo» de dicho conflicto «dependerían» de Washington. «No hay duda de que Irán posee la capacidad de defender su seguridad y sus intereses», concluyeron.
Por su parte, un portavoz del Pentágono afirmó al medio que «ninguna fuerza militar estadounidense ha llevado a cabo ataques u operaciones dentro de Irán». John Moore, portavoz del Mando Central de EE.UU., también señaló que Washington no ha estado involucrado en ningún ataque contra instalaciones militares del país persa.
La noche del pasado sábado, un serie de explosiones tuvieron lugar en varias instalaciones estratégicas de Irán. Uno de los estallidos se produjo en un centro de producción de municiones del Ministerio de Defensa en la ciudad de Isfahán. La Cancillería iraní comunicó que se trató de un «ataque fallido» que se llevó a cabo con microdrones.
Si bien Washington desmiente que fuerzas militares estadounidenses estuvieron involucradas en el ataque, Al Arabiya reportó, citando a sus fuentes en el país norteamericano, que la Fuerza Aérea de EE.UU. y de «un país más» participaron en la acción. Por su parte, The Wall Street Journal publicó, citando a funcionarios estadounidenses y personas familiarizadas con el operativo, que Israel realizó «un ataque con drones clandestino» contra un complejo de defensa en Irán.
