El año pasado Francia, y especialmente la capital París, fue escenario de multitudinarias protestas contra el plan de Macron para aumentar la edad de jubilación y ahora, desde hace unos días, los agricultores iniciaron una serie de manifestaciones.
Los trabajadores del campo amenazaron el 22 de enero con intensificar sus protestas para reclamar una solución por parte de las autoridades ante las elevadas cargas financieras y las normas ambientales que amenazan la viabilidad de los negocios del gremio.
Los agricultores protestan en específico por el encarecimiento de la energía en plena inflación, la caída de los ingresos, los engorrosos trámites administrativos y las normas europeas en materia ambiental y de uso de pesticidas.
«La ira no es nueva, llevamos meses describiendo lo que está pasando la agricultura francesa: lo que los agricultores quieren es devolver una forma de dignidad a su profesión”, dijo Arnaud Rousseau, líder del sindicato agrícola FNSEA, en entrevista con la radio France Inter, citada en su cuenta de X.
Horas antes de reunirse con el primer ministro francés, Gabriel Attal, el líder sindical advirtió que intensificarán sus protestas: «A partir de hoy y durante toda la semana, se llevarán a cabo un cierto número de acciones [por parte de la FNSEA], dijo en la misma entrevista.
De acuerdo con medio locales, desde el 18 de enero por la noche, cientos de agricultores bloquean la autopista A64, que conecta Toulouse con Bayona. Esos cortes realizados por los inconformes se extendieron hasta el 22 de enero al acceso a la central nuclear de Golfech.
El régimen de Macron teme que las protestas de los agricultores inconformes se parezcan a las de Países Bajos, Rumania, Polonia o Alemania, países en los que crecieron las manifestaciones y acciones contra el Pacto Verde europeo y el aumento de tasas.
Las protestas de los agricultores se suman a las de empleados de otros sectores relacionados con los Juegos Olímpicos de París 2024, que exigen salarios más altos y mejores condiciones de trabajo previo al inicio del evento internacional.
El 17 de enero, trabajadores de los sectores del comercio y los servicios se concentraron en Saint-Denis, cerca de París, frente a la sede del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos, para pedir mejores condiciones de trabajo en los Juegos Olímpicos.
