Este domingo en una entrevista ofrecida al diario árabe Al-Hayat, Bogdanov ha rechazado las acusaciones de que Teherán obstaculiza una solución pacífica a la crisis de Siria, y las ha calificado de sin fundamentos porque, según ha dicho, no existe ninguna prueba que muestren la veracidad de dichas alegaciones.
Al ser preguntado si Irán debe poner fin a su asesoramiento militar en el país árabe ha respondido: “Actualmente en Siria luchan voluntarios de diversos países extranjeros, entre ellos de Marruecos y Afganistán y yo me pregunto ¿por qué se ha de pedir a Irán que retire su apoyo?”, ha puesto en entredicho Bogdanov.
Asimismo, ha hecho recordar que “es el Gobierno sirio el que tiene todo el derecho de pedir a los países extranjeros que retiren su presencia una vez que haya sido encontrada una solución política a las cuestiones”.
Estas declaraciones de Bogdanov se producen a raíz de que, sobre todo, el régimen israelí siente gran inquietud por la posición regional de Irán, la cual fue consolidada por los avances del Ejército sirio frente a terroristas.
Cabe mencionar que el jueves pasado, citando a altos funcionarios israelíes, el diario Times of Israel, informó de que en las actuales circunstancias, lo que más preocupa a Tel Aviv es la alianza entre Teherán, los combatientes del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) y el Gobierno sirio de Bashar al-Asad, contra los terroristas activos en Siria.
El diplomático ruso ha anunciado, además, el respaldo de Moscú a la participación de Irán y otros países de la región para solucionar desafíos como los que enfrentan países como Siria e Irak, recordando que el año pasado durante la reunión del Grupo Internacional de Apoyo a Siria, fueron firmados documentos entre Irán, Turquía, los países del Golfo Pérsico y EE.UU., los cuales podrán servir de base para expandir dicha participación regional.