Israel siente gran inquietud por la posición regional de Irán, la cual fue consolidada por los avances del Ejército sirio frente a terroristas, según un alto oficial israelí.
“La cuestión estratégica más importante que estamos enfrentando actualmente es el fortalecimiento del eje chií, liderado por Irán en Siria, especialmente después de la caída de Alepo”, dijo el jueves el director general del ministerio israelí de inteligencia, Chagai Tzuriel.
Hablando en una entrevista exclusiva con el diario Times of Israel, Tzuriel afirmó que, en las actuales circunstancias, lo que más preocupa a Tel Aviv es la alianza entre Teherán, los combatientes del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) y el Gobierno sirio de Bashar al-Asad, contra los terroristas activos en Siria.
Los recientes acontecimientos en Siria han creado “un fuerte desequilibrio en la región a beneficio de Irán”, agregó Tzuriel.
El funcionario israelí criticó a la anterior Administración estadounidense, diciendo que la decisión del presidente Barack Obama, en 2013, de no usar la fuerza militar contra el Gobierno de Al-Asad “fue un momento crucial para toda la región (…), y abrió la puerta para que Rusia tomara protagonismo”.
Sin embargo, aplaudió la postura favorable del actual presidente de EE.UU., el republicano Donald Trump, para usar la fuerza militar en Siria, y enfatizó que la continúa participación de EE.UU. en la guerra siria es “crucial para los intereses de Israel”. “Para Israel, es importante ver que EE.UU. sigue activo en Siria y en la región”, acentuó.
Saludó también la postura negativa de Trump hacia el acuerdo nuclear iraní, apoyado por el Gobierno de Obama y alcanzado en julio de 2015 entre Teherán y el Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania).
“El sentimiento en Israel era que Obama no veía a Irán como parte del problema. Trump, por el contrario, parece ver a Irán como parte del problema”, señaló Tzuriel, repitiendo por enésima vez la acusación de que bajo el pacto nuclear, Teherán tendrá el tiempo suficiente para fabricar “varias bombas nucleares”.
Evitando pedir que se rompa dicho acuerdo —debido al gran apoyo que tiene en todo el mundo—, el funcionario israelí se conformó con decir que sería bueno someterlo a algunas revisiones, que permitan “incluir restricciones al programa de misiles iraníes”, entre otras sanciones.
Las autoridades persas han rechazado en reiteradas ocasiones cualquier posibilidad de revisar el pacto, y han prometido dar respuestas contundentes a posible ruptura del convenio por parte de Washington.
