La península de Crimea jamás podrá volver al territorio ucraniano y las sanciones no cambiarán la situación, asegura un político alemán.
“Crimea nunca volverá a Ucrania y las sanciones no ayudarán. Estaría bien, si Crimea fuera reconocida como parte de Rusia”, ha dicho este sábado el vicepresidente del partido de Alternativa para Alemania (AfD, en alemán), Alexander Gauland.
Las declaraciones prorrusas entre los políticos alemanes han aumentado en los recientes días. El líder del Partido Democrático Libre (FDP, en alemán), Christian Lindner, también ha pedido que Berlín considere a Crimea como un tema separado.
En su opinión, este enfoque podría ayudar a lograr el éxito en otros aspectos de las relaciones entre la Unión Europa (UE) y Rusia, pero si esto no ocurre, las sanciones serán endurecidas. Las afirmaciones de Lindner provocaron un amplio debate en Alemania.
“Rusia es un poder, deberíamos involucrarlo en la formación de un nuevo orden europeo”, ha destacado Lindner, para luego advertir de una confrontación militar entre la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y Rusia.
Tras el derrocamiento de expresidente ucraniano Víktor Yanukóvich debido a un golpe de Estado en febrero de 2014, comenzaron las protestas masivas en Crimea y las regiones orientales de Donetsk y Lugansk. El 11 de marzo del mismo año, el Consejo Supremo de Crimea y el Consejo de Sebastopol adoptaron una declaración de independencia.
El 16 de marzo de 2014, se realizó un referéndum sobre la reunificación de Crimea con Rusia. Más del 80 % de los votantes participó en el plebiscito, la mayoría de ellos (96,7 %) apoyó la idea.
El 18 de marzo, el tratado sobre la anexión de Crimea a Rusia fue firmado por el presidente ruso, Vladimir Putin, y la Asamblea Federal de Rusia (Parlamento) aprobó el documento el 21 de marzo.
Tras estos sucesos, la UE y EE.UU. impusieron sanciones contra Moscú. Sobre algunos funcionarios rusos pesan restricciones de ingreso a los países miembros del bloque comunitario y a Estados Unidos, y sus activos fueron congelados. A su vez, Moscú implementó muchas medidas de represalia.
