En un intento de combatir el grave problema de la contaminación atmosférica enfrentado por China, se ha construido una torre de purificación de aire de 100 metros de altura en la ciudad de Xian, en la provincia de Shaanxi.
Según Cao Junji, científico que lidera el proyecto, la torre experimental, llamada informalmente ‘el mayor purificador de aire del mundo’, ha causado una notable mejora en la calidad del aire en la zona central de la urbe, informó South China Morning Post.
De acuerdo con Cao, en los últimos meses se han observado mejoras en la calidad del aire en un área de 10 kilómetros cuadrados alrededor de la estructura. Además, la torre ha logrado producir más de 10 millones de metros cúbicos de aire limpio por día desde su lanzamiento. Cao agregó que en días severamente contaminados la torre fue capaz de reducir el intenso esmog —niebla contaminante— a niveles moderados.
El aire contaminado es absorbido por la torre y calentado por la energía solar. El aire caliente luego se eleva a través de la estructura y pasa a través de múltiples capas de filtros de limpieza antes de volver a la atmósfera.
China builds world's largest air purifier to battle smog https://t.co/Ts80NcuZ4C pic.twitter.com/A40qxjfFwT
— Yahoo News UK (@YahooNewsUK) January 17, 2018
Cao detalló que los resultados obtenidos todavía son preliminares, una vez que el experimento aún está en curso. El equipo científico responsable de monitorear el desempeño de la torre planea publicar datos más detallados acerca de su funcionamiento en marzo del año corriente.
La construcción de la instalación tiene el objetivo de encontrar un método eficaz y de bajo costo para eliminar artificialmente los contaminantes de la atmósfera. El coste total del proyecto, sin embargo, no fue revelado.
La instalación experimental en Xian es una versión reducida de una torre antiesmog mucho más grande que Cao y sus colegas esperan construir en otras ciudades de China en el futuro. Las estructuras podrían alcanzar unos 500 metros de altura y cubrirían una región de unos 30 kilómetros cuadrados, lo suficientemente para purificar el aire de una ciudad pequeña.
