La delegación permanente de Siria ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) enfatiza que las acusaciones de Estados Unidos contra Damasco y Moscú sobre presunto ataque químico en la región de Guta Oriental tienen por meta proteger a los terroristas.
A través de un comunicado emitido el jueves, la delegación siria denunció que las acusaciones sin fundamento formuladas el martes por la embajadora de EE.UU. ante la ONU, Nikki Haley, contra Siria y Rusia so pretexto de perturbar los mecanismos internacionales para investigar el uso de sustancias químicas se producen con la intención de “proteger a los grupos terroristas” respaldados por ciertos países.
Haley responsabilizó al Gobierno sirio de un supuesto ataque químico, acaecido el pasado 22 de enero en la localidad de Duma, en Guta Oriental—distrito situado al este de Damasco (capital siria) —, y señaló a Rusia como “cómplice” de Siria en este tipo de agresiones.
“La política de dirigir tales acusaciones contra el Gobierno sirio ignora por completo el hecho probado de que Siria fue la primera en iniciar una investigación sobre los incidentes del uso de gases venenosos por parte de grupos terroristas, respaldados por EE.UU., los países occidentales y Arabia Saudí”, se lee en el texto.
Las afirmaciones de Haley, prosigue, también ignoran los esfuerzos de Damasco de informar al mundo de los crímenes que cometen y siguen cometiendo los grupos terroristas y sus partidarios contra los civiles inocentes mediante el uso de material químico.
A continuación, el texto enfatiza que tales intentos de Washington hacen caso omiso a las pruebas proporcionadas por el país árabe a la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) y el Mecanismo Conjunto de Investigación (JIM, por sus siglas en inglés) de la ONU, que comprobó que dichas bandas ultrarradicales poseen sustancias prohibidas.
El comunicado, subraya que en vez de practicar este método, la embajadora estadounidense debe criticar a las administraciones de su país, que violan las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) al no respetar la soberanía, independencia, unidad e integridad territorial de Siria.
Por otro lado, el comunicado se refirió a los crímenes cometidos por la llamada coalición contra la banda takfirí EIIL (Daesh, en árabe) liderada por EE.UU., contra los civiles en la ciudad siria de Al-Raqa (norte), donde los cuerpos de personas inocentes aún están bajo los escombros, puntualiza.