Las facultades de medicina no explican a sus alumnos lo más elemental: que la vida, la muerte, la salud y la enfermedad dependen de las clases sociales más que de factores “naturales”. No sólo dependen del hambre, la explotación, el salario, la (infra)vivienda o la comida basura, sino también de los recortes en los presupuestos de sanidad o su privatización.

Las diferencias de clase se reflejan en diferencias de longevidad. En Gran Bretaña la crisis del capitalismo ha conducido a que la esperanza de vida se estanque y, por primera vez, disminuya en algunas zonas de Gales y Escocia. Una niña nacida entre 2015 y 2017 puede esperar vivir 82,9 años, mientras que un niño debería vivir 79,2 años. Estas cifras son inferiores a las de varios países europeos con niveles de desarrollo comparables, como Suiza, Francia, Italia y España.

En Gran Bretaña el número de trabajadores pobres aumenta y hay un millón de personas que utilizan los bancos de alimentos. Los suicidios, las enfermedades hepáticas y cardíacas y el cáncer están aumentando. Algunos médicos con un poco de criterio hablan del síndrome de “una vida de mierda” (shit life, en inglés) para referirse al abandono de los ancianos, los antidepresivos, la comida basura, el alcohol o el desaliento.

En el barrio más caro de Londres, Chelsea, los ricos viven en promedio 16 años más que los pobres. “Trato de comprar los productos adecuados”, dice Esther, de 75 años, “pero todo es demasiado caro”, añade.

Otro jubilado, Pedro, dice que “todo se rompe. Nos están matando. Ni siquiera podemos abrir la ventana por la contaminación. Tengo dos amigos que han muerto. Es lo que sucede cuando se vive en este tipo de ambiente”.

Michael G.Marmot, un epidemiólogo con más de 40 años de experiencia, explica que “las desigualdades en salud están empeorando y eso es muy preocupante” y añade que “los ancianos ya no son atendidos en casa como antes”.

Está a surgiendo una preocupación sobre los estragos del capitalismo en la salud de millones de personas, incluso en los países más “avanzados”.

Es muy recomendable que los médicos echen un vistazo a las obras de Marmot, en especial a su obra “The Health Gap: The Challenge of an Unequal World” (Las diferencias de salud: El desafío de un mundo desigual), publicada en 2015.

DEJA UN COMENTARIO (si eres fascista, oportunista, revisionista, liberal, maleducado, trol o extraterrestre, no pierdas tiempo; tu mensaje no se publicará)

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.