Nikolái Pátrushev, secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, denunció en una entrevista con el periódico ruso Argumenty i Fakty, que Washington prepara una intervención militar a Venezuela.
Para alcanzar su objetivo, afirmó, «Washington desplaza sus fuerzas especiales en Puerto Rico y envía militares a Colombia, lo que muestra claramente que el Pentágono aumenta la agrupación de sus tropas en la región con el fin de utilizarlas en una operación de derrocamiento del legítimamente elegido presidente Nicolás Maduro».
Por su parte, el canciller venezolano, Jorge Arreaza, acusó al asesor de Seguridad Nacional estadounidense, John Bolton, de «actuar como un gánster».
También la representación de Estados Unidos ante la onu intenta imponer, una vez más, un asunto fuera de la agenda del Consejo de Seguridad de ese organismo, al solicitar una reunión sobre la situación en Venezuela.
Esta es la segunda sesión sobre el tema que este año ha pedido la delegación estadounidense, miembro permanente, en esa instancia del organismo multilateral. Bajo presiones de Estados Unidos, el 26 de enero ese órgano abordó la situación en Venezuela, a pesar de que varios miembros expresaron su rechazo y consideraron que el asunto no debía ser discutido pues no representa una amenaza a la paz y la seguridad internacionales.
En tanto, Rusia elabora un texto alternativo, que reitera la necesidad de respetar los principios de la Carta de la onu, como la no intervención en los asuntos internos y la solución pacífica de controversias.
Para que una resolución sea aprobada en el Consejo de Seguridad se necesita el voto favorable de la mayoría de sus miembros y que no exista el veto de ninguna de los permanentes, los cuales tienen ese privilegio: Estados Unidos, Rusia, China, Reino Unido y Francia.
«Ya pasó el tiempo de las intervenciones militares en América Latina», opinó el lunes el máximo representante de la Organización de las Naciones Unidas (onu), António Guterres, durante una entrevista concedida al medio suizo rts. De acuerdo con Guterres, una intervención militar solo podría autorizarse en el marco de la Carta de las Naciones Unidas. Y explicó que sería una ingenuidad pensar que fuera posible lograr consenso al respecto en el seno de la onu, teniendo en cuenta las circunstancias actuales.
Cifras del bloqueo financiero contra Venezuela
El bloqueo financiero a Venezuela supuso la pérdida de 350 000 millones de dólares en producción de bienes y servicios entre 2013 y 2017.
El bloqueo contra Venezuela, en términos generales, busca restringir la capacidad de ingresos nacionales, se trata de un embargo a la principal fuente de recursos del país la petrolera estatal Pdvsa, cerrar las fuentes de financiamiento externo y boicotear la capacidad de acceso a los mercados internacionales de bienes y servicios.
La elevación del indicador de «riesgo país», a pesar de que Venezuela cumplió con los pagos de su deuda externa de manera puntual, ocasionó que los gastos que se generaron entre 2013 y 2017 ascendieran a más de 17 000 millones de dólares, unos 3 300 millones de dólares anuales.
Si se suma el valor de las divisas que no entraron producto del bloqueo (19 200 millones), más lo que el país tuvo que pagar cada año por la deuda externa (3 300 millones), se puede concluir que la economía sufrió una asfixia internacional de 22 500 millones de dólares anuales.
Desde que Nicolás Maduro asumió la presidencia en 2013, el sector público venezolano dejó de recibir en términos netos flujos equivalente a 19 000 millones de dólares anuales.
La principal estrategia se basa en la expulsión de Venezuela de los mercados financieros internacionales, impidiéndole recurrir al mercado de créditos, tanto para renovar vencimientos como para realizar nuevas colocaciones.
FUENTE: MISIÓN VERDAD
OTRAS FUENTES: AL MAYADEEN, SPUTNIKNEWS, RT Y VICEPRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA.
