El representante especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para Libia, Ghassan Salamé, alertó este martes que la nación africana está al borde de la guerra civil ante la violencia que ocurre en la periferia de Trípoli (capital).
Durante una sesión del Consejo de Seguridad del organismo multilateral, el funcionario explicó que el conflicto armado en las cercanías de la ciudad se ha intensificado durante las últimas semanas.
Además, informó que unas 460 personas han muerto, de las cuales 29 son civiles, mientras que otras 2.400 resultaron heridas desde el inicio del conflicto en abril pasado, así como 75.000 han abandonado sus hogares para escapar de la violencia.
#Libia se encamina hacia una guerra civil que causaría una división permanente y que pone en riesgo toda la región del Mediterráneo.
ISIS y Al Qaeda están aprovechando el vacío de poder en el país, advierte @GhassanSalame https://t.co/uLiAr5ZMKS— Noticias ONU (@NoticiasONU) May 21, 2019
«Muchos países suministran armas a todas las partes en conflicto sin excepción. La sofisticación de este armamento está causando ya un mayor número de víctimas», denunció.
Por otro lado, advirtió que la concentración de fuerzas contrarias en Trípoli ha dejado desprotegidas otras regiones del país.
Esto ha permitido que permite que grupos terroristas, como el autodenominado Estado Islámico (Daesh, en árabe), resurjan al sur de la nación.
Otro peligro alertado por Salamé es que los países vecinos de Libia corren el riesgo de que la violencia se extienda hacia sus territorios.
“No hay una solución militar, es momento de que los que han elegido esa opción abran los ojos y se ajusten a la realidad. Libia es un mosaico de comunidades que no puede gobernarse sin alianzas en todo el territorio”, enfatizó.