Teherán ha recibido un mensaje de parte del presidente de EE.UU., Donald Trump, a través de las autoridades de Omán acerca de «un ataque inminente contra Irán», informa este viernes Reuters con referencia a funcionarios iraníes.
«En su mensaje, Trump dijo que estaba en contra de cualquier guerra con Irán y quería hablar con Teherán sobre varios temas», han indicado los iraníes, añadiendo que el mandatario estadounidense «dio un corto período de tiempo para obtener nuestra respuesta«.
«Pero la respuesta inmediata de Irán fue que el líder supremo [el ayatolá Alí Hoseiní] Jameneí decidirá sobre este tema», agregó un funcionario iraní bajo condición de anonimato.
Otro funcionario detalló que Teherán dejó claro «que el líder está en contra de cualquier conversación, pero se le enviará el mensaje para que tome una decisión». «Sin embargo, le dijimos al funcionario omaní que cualquier ataque contra Irán tendrá consecuencias regionales e internacionales«, concluyó.
Previamente transcendió que Trump había aprobado varios ataques contra Irán a raíz del derribo de un dron de su país por parte de la Guardia Revolucionaria, pero retrocedió de manera repentina. Un alto cargo familiarizado con el asunto señaló que «la operación estaba en marcha en sus primeras etapas cuando fue cancelada».
«Los aviones estaban en el aire y los barcos estaban en posición«, aseguró. Supuestamente, estaba previsto que el ataque tuviera lugar justo antes del amanecer del viernes para minimizar el riesgo para militares y civiles iraníes.
Derribo del dron estadounidense
Un dron RQ-4 Global Hawk estadounidense fue derribado por Irán este 19 de junio cerca del estrecho de Ormuz, en lo que los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán califican como una violación del espacio aéreo del país.
Teherán sostiene que la aeronave de vigilancia había ingresado a su espacio aéreo en la provincia de Hormozgán al momento de su derribo, pero Washington afirma que en ningún punto de su trayecto el dron salió del espacio aéreo internacional.
Por su parte, Donald Trump sugirió que el incidente pudo haber sido involuntario y obra de alguien «relajado y estúpido», pero afirmó que en el país persa cometieron «un error muy grande» con esta acción. El mandatario añadió que se «sabrá pronto» si EE.UU. planea atacar a Irán luego de este suceso.