Irán desestima la advertencia de Europa de retirarse del acuerdo nuclear, resaltando que la reactivación de las sanciones antiraníes “ya está muerta”.
En una rueda de prensa celebrada este lunes en Teherán, la capital, Abás Musavi, el portavoz de la Cancillería, ha hecho alusión a un reciente informe publicado por el diario británico The Guardian sobre la supuesta amenaza lanzada por la Unión Europea (UE) contra Irán relativa a su salida del pacto, si el país persa diese nuevos pasos en la reducción de los compromisos asumidos en el mismo.
“No tengo idea de la amenaza de los europeos, pero si quieren insinuar que utilizarán el mecanismo Snapback (mecanismo que permite volver a establecer rápidamente las sanciones en caso de incumplimientos), en caso de que Irán anuncie más pasos para reducir sus obligaciones, les recuerdo que tal medida es ilegal”, ha respondido de manera contundente Musavi a un grupo de periodistas.
De acuerdo a The Guardian, los tres signatarios europeos del acuerdo nuclear (el Reino Unido, Alemania y Francia) habían amenazado a Irán previamente, informándole de que comenzarían a retirarse del acuerdo el próximo mes de noviembre.
Musavi, además, ha rechazado las posibilidades de que la parte europea remita el caso nuclear iraní ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU), destacando que el mecanismo para renovar las sanciones de la ONU contra Irán “ya está muerto”.
En otra parte de sus declaraciones, ha hecho hincapié en que Irán tiene el derecho de tomar medidas compensatorias, en virtud de los artículos 26 y 36 del acuerdo nuclear firmado en 2015—de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), en caso de que las otras partes no cumplan. “Sería una medida ridícula si quieren responder las medidas compensatorias de Irán”, ha agregado el vocero persa.
Después de que EE.UU. abandonó el PIAC en el 2018, Irán esperó un año antes de tomar medidas, dando así una oportunidad al resto de los firmantes del convenio para salvarlo. Pero, dado que Europa no adoptó medidas prácticas, el país persa decidió en mayo actuar en reciprocidad y, conforme al pacto, reducir progresivamente algunos de sus compromisos y forzar a sus socios europeos a asumir sus obligaciones.
En concreto, Irán ha dado hasta ahora tres pasos para reducir sus compromisos nucleares: primero, suspendió la venta de uranio enriquecido y el excedente de agua pesada —como lo establecía el pacto— y, segundo, aumentó el enriquecimiento de uranio por encima de los niveles acordados en el acuerdo, es decir, el 3,67 %. Como tercer paso, Teherán activó el 7 de septiembre una cadena de 20 centrifugadoras IR4 y 20 centrifugadoras IR6.
Ante la inacción de Europa, el Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, dudó el pasado jueves de la buena fe de los europeos y afirmó que no había que tener la mirada puesta en los enemigos de la Revolución Islámica, fuera Europa o EE.UU.