La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condena el asesinato de manifestantes en medio de la represión policial de las protestas en Ecuador.
La CIDH llamó el sábado a un “urgente y efectivo” esfuerzo de diálogo y respeto a los derechos humanos en Ecuador en medio de las fuertes protestas populares en distintas ciudades, entre ellas Quito (la capital), Ambato, Cotopaxi, Cuenca, Imbabura, Cayambe y Guayaquil, en rechazo a las medidas económicas implementadas por el Gobierno de Lenín Moreno.
Ante la ola de manifestaciones —que, hasta ahora, ha dejado 7 muertos y cientos de heridos—, el presidente ecuatoriano decretó el sábado el “toque de queda” y la “militarización” de Quito.
“La CIDH condena enérgicamente los disparos en contra de los manifestantes. La CIDH insta a Ecuador a respetar los derechos humanos de los manifestantes y asegurar su integridad. Además, urge a investigar los hechos y sancionar a los responsables”, indicó el ente.
En otro tuit, la CIDH repudió la represión de la Policía ecuatoriana contra las comunidades indígenas que se encontraban resguardadas en la Casa de la Cultura, en Quito, donde el pasado jueves se realizó un homenaje a los fallecidos durante las protestas.
La #CIDH condena enérgicamente disparo en contra manifestante. La #CIDH insta #ecuador a respetar los derechos humanos de los manifestantes y asegurar su integridad. Además, urge a investigar el hecho y sancionar los responsables. (6/7) pic.twitter.com/4hAopWIZsH
— CIDH – Comisión Interamericana de Derechos Humanos (@CIDH) October 12, 2019
En este mismo contexto, el ente exigió al Gobierno ecuatoriano respetar “el derecho a la integridad física” de los manifestantes, tras conocer denuncias de un convoy “de camiones militares” que “atropelló a ciudadanos en las calles” de Quito.
Las protestas, en que participan cientos de comunidades indígenas, estallaron después de que el 3 de octubre Moreno anunció la eliminación de los subsidios a los combustibles —dejando así una práctica de 47 años —, entre otras medidas, en el marco de un acuerdo crediticio con el Fondo Monetario Internacional (FMI), a cambio de 4200 millones de dólares, destinados a reducir el déficit fiscal.
En este punto de la crisis, las demandas de los manifestantes no solo incluyen la derogación del decreto referente a los combustibles, sino la salida del FMI de Ecuador, así como de dos ministros del Gobierno y, en algunos casos, hasta la renuncia del presidente Moreno o elecciones anticipadas.
