La exportación de productos minerales de Irán a China ha registrado un aumento considerable, a pesar de la guerra económica de EE.UU. contra el país persa.
Conforme a nuevos datos ofrecidos por el Ministerio de Industria, Minas y Comercio de Irán, las exportaciones minerales del país al gigante asiático han alcanzado entre el mes de marzo y finales de octubre de este año un valor total de 1568 mil millones de dólares.
Esta cantidad constituye un aumento de 150 por ciento en las exportaciones de metales y minerales a China en comparación con el mismo plazo del año pasado, según asevera el informe de la Cartera persa, publicado este domingo.
Los principales artículos en la lista de exportaciones del país persa a China incluyen mineral de hierro y concentrados (por valor de 673 millones de dólares), cátodos de cobre (408 millones), lingotes de acero (207 millones), concentrado de cobre (127 millones) y lingotes de zinc (57 millones), agrega la nota.
El informe, además, ha detallado que el valor total de las exportaciones de metales y productos mineros de Irán a varios países de la región ha llegado en el mismo período a 4631 mil millones de dólares, lo que muestra un aumento de 6,16 por ciento interanual.
Tras China, Irak está en segundo lugar de la lista de los principales destinos de las exportaciones de minerales persas, seguido por Indonesia, Tailandia y Turquía, reza el dossier del Ministerio iraní, para después agregar que países como Afganistán, Emiratos Árabes Unidos (EAU), Omán, Paquistán y Ghana también habían importado de Irán productos metálicos por valor de 100 millones de dólares.
EE.UU. ha recurrido a su “llamada política de máxima presión” contra Irán y ha impuesto varias rondas de sanciones contra diversos sectores del país, tras retirarse del acuerdo nuclear firmado en julio de 2015 entre Teherán y el Grupo 5+1 (conformado entonces por EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania).
Mientras tanto, las autoridades iraníes han condenado una y otra vez la postura hostil de Washington contra su país, que tiene como objetivo principal reducir la calidad de vida de los iraníes, tal y como ha reconocido el presidente estadounidense, Donald Trump.
La República Islámica ha aseverado también que adoptará todos los medios legítimos para defender los derechos fundamentales de su pueblo frente a las medidas draconianas de Washington, al mismo tiempo ha manifestado que la presión económica de EE.UU. no “pondrá de rodillas” a los iraníes.
