“El sistema de defensa antiaérea ha repelido unos objetivos hostiles contra zonas occidentales de Damasco”, ha informado la madrugada de este jueves la agencia oficial siria de noticias, SANA.
El medio sirio, que ha citado fuentes militares, ha detallado que varios de los objetivos fueron destruidos antes que alcanzaran los blancos que tenían determinados.
La agresión ha sido lanzada por el régimen de Israel desde los ocupados altos del Golán, ha insistido la fuente, sin dar más detalles sobre los posibles daños materiales o humanos provocados por el incidente.
A mediados de enero, las defensas antiaéreas de Siria hicieron frente a una “agresión” israelí contra una base militar en el centro del país. Fuentes sirias explicaron, en ese entonces, que el ataque contra la base de la fuerza aérea T-4, en la provincia de Homs, causó solamente daños materiales porque la mayoría de los cohetes fueron interceptados y solo cuatro dieron en el blanco.
Desde el inicio del conflicto en Siria, en 2011, han sido recurrentes los bombardeos israelíes contra objetivos militares o en algunos casos civiles en el país levantino. Muchos de los ataques han sido neutralizados por la defensa antiaérea siria.
En octubre de 2018, Rusia anunció haber entregado el sistema de defensa aérea S-300 a Siria, adjudicación que fue realizada un mes después de que un ataque de cazas F-16 israelíes provocara el derribo de un avión militar ruso, con 14 militares a bordo, en el oeste del país árabe.
La agresión de este jueves coincide con los avances del Ejército sirio en la provincia noroccidental de Idlib, donde ha arrebatado decenas de localidades a las facciones extremistas afines a Al-Qaeda.
