Así ha denunciado la Misión Permanente de Irán ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en su carta titulada: “Los impactos de las sanciones de Estados Unidos en la guerra contra el coronavirus”, emitida este domingo a este órgano internacional.
El texto destaca que el mundo entero se enfrenta ahora a “una guerra mundial” contra un “enemigo común” que amenaza sin distinción de nacionalidad, raza, color, religión o género. Así que, “ninguna nación se salvará y nadie estará a salvo hasta que todos en el mundo estén a salvo”.
“En nuestra lucha común contra COVID-19, las sanciones, al socavar nuestro frente desde dentro a favor del enemigo, funcionan exactamente como la ‘quinta columna’. No es más que una traición”, destaca el texto.
Además, explica que como las sanciones restringen la capacidad de una nación para hacer frente a la crisis “permite que la enfermedad se propague como un incendio forestal y, en consecuencia, debilita la lucha mundial contra la pandemia” y concluye que, así su aplicación “va en contra de los intereses comunes de la humanidad”.
La Misión persa ha recordado también que el 27 de febrero pasado el Departamento estadounidense del Tesoro finalizó con mucha fanfarria el llamado Acuerdo Comercial Humanitario Suizo (SHTA, por sus siglas en inglés) para permitir transacciones humanitarias. “Sin embargo, este estrecho canal no coincide con las necesidades humanitarias de Irán en la situación actual”, indica.
Mientras Irán, prosigue la carta, está experimentando uno de los peores brotes del coronavirus, las fuertes sanciones de Estados Unidos están obstaculizando drásticamente la lucha de Irán para identificar y tratar a los pacientes y prevenir de manera efectiva la propagación del virus.
Por lo tanto, ha mencionado que muchos órganos internacionales como la ONU y la Organización Mundial de la Salud (OMS), así como muchas figuras mundiales han hecho llamamientos “tan fuertes y reiterados” a Washington para levantar sus bloqueos.
La carta ha exigido ir más allá de una simple “expresión de solidaridad” y demostrar “solidaridad en acción” y llama a la comunidad internacional a no permitir la aplicación continua de sanciones inhumanas e ilegales, cuya eliminación urgente “es del interés de toda la humanidad”.
