En declaraciones ofrecidas el lunes durante la novena reunión ministerial del Foro de Cooperación China-Estados Árabes, el ministro de Asuntos Exteriores del gigante asiático, Wang Yi, aseveró que el derecho inalienable de los palestinos no debería ser violado.
“La histórica demanda del pueblo palestino por justicia no debe ser ignorada por tanto tiempo. China siempre se encuentra al lado del pueblo palestino”, dejó claro en el Foro, celebrado vía videoconferencia.
El máximo diplomático chino reiteró también que Pekín apoya a los Estados árabes a la hora de preservar la seguridad política, la estabilidad social y elegir el camino del desarrollo no dependiente.
Wang agregó que a pesar de los cambios en la situación internacional, China insiste en el desarrollo pacífico y una cooperación ganar-ganar con otros países.
El canciller chino aprovechó la ocasión para hacer énfasis en que Hong Kong, la región autónoma de Xinjiang (ubicada en el noroeste de China) y Taiwán son partes inseparables del territorio nacional de China y que Pekín rechaza cualquier injerencia foránea en sus asuntos internos.
A la novena reunión por videoconferencia de los ministros del Consejo de Cooperación China-Árabe asistieron los ministros de 21 países árabes y el secretario general de la Liga Árabe.
Las autoridades chinas han rechazado en diferentes ocasiones el proyecto del régimen de Israel para anexionarse partes de la Cisjordania ocupada y llaman al régimen ocupante a abstenerse de adoptar pasos que socaven la paz en la zona.
La anexión de un tercio de Cisjordania es un proyecto israelí que forma parte del llamado ‘acuerdo del siglo’, auspiciado por Estados Unidos. Este plan, presentado en enero por la Casa Blanca, otorga a los palestinos una autonomía limitada dentro de una patria discontinua, y deja en manos de Israel el cotizado valle del Jordán y olvida la problemática de millones de refugiados palestinos deseosos de retornar a sus tierras.
La controvertida iniciativa israelí sobre Cisjordania ha levantado una ola de condenas y rechazos tanto entre los palestinos, como entre la comunidad internacional.
China apoya firmemente, además, el establecimiento de un Estado palestino independiente con plena soberanía, sobre la base de las fronteras de 1967 y con la ciudad de Al-Quds (Jerusalén) como su capital.
